El Gobierno peruano ha oficializado el último feriado largo del 2025, que se celebrará del 6 al 9 de diciembre. Este descanso se debe a dos fechas históricas y religiosas: la Inmaculada Concepción (8 de diciembre) y la conmemoración de la Batalla de Ayacucho (9 de diciembre), una de las gestas más importantes en la independencia sudamericana.
Este feriado no solo representa una oportunidad para el descanso familiar, sino también para reactivar el turismo interno, ya que se espera un incremento significativo en viajes hacia destinos como Cusco, Arequipa, Ayacucho y la costa norte. Hoteles, restaurantes y operadores turísticos ya se preparan con promociones especiales para atraer visitantes.
Además, el Ejecutivo ha declarado el 26 de diciembre como día no laborable para el sector público, lo que sumará otro fin de semana largo en plena Navidad. Esta medida busca dinamizar la economía, fomentar el turismo y dar un respiro a los trabajadores antes del cierre del año.
En resumen, diciembre se perfila como un mes ideal para viajar, compartir en familia y disfrutar de la riqueza cultural del Perú, mientras se impulsa la economía local.