Dra. Karola Manchego Lara profesional en el campo de la comunicación y el periodismo, actualmente decana nacional del Colegio de Periodistas del Perú y docente principal en la Escuela de Ciencias de la Comunicación. Graduada como Doctora en Ciencias, especialidad en Comunicación y Desarrollo, de la Universidad Nacional de San Agustín, ha continuado su formación con una Maestría en Ciencias con mención en Comunicación en la misma institución. A lo largo de su carrera, ocupó diversos cargos de liderazgo en el ámbito colegiado y académico. Orgullosa de sus tres hijos.
«Mis padres siempre quisieron que estudiara derecho, sin embargo, yo tenía muy claro que mi pasión era el periodismo.» En una entrevista con Karola Ysabel Lara Manchego, madre de 3 hijos, decana nacional del Colegio de Periodistas del Perú, exploramos los desafíos y satisfacciones de ser madre y periodista en la sociedad actual. Desde su motivación inicial hasta cómo ha enfrentado los obstáculos, y cómo ve la maternidad influyendo en las oportunidades y desafíos de las mujeres periodistas en el país.
¿Cuál fue la razón que la motivó a dedicarse al periodismo en sus inicios de estudio?
Cuando era pequeña admiraba a muchos periodistas, especialmente por su compromiso con la ciudadanía, lo que me motivó a servir a la sociedad en general. Además, algunos estudios en teatro, como la dramatización de temas relacionados con la profesión, fortalecieron mis convicciones.
¿Considera que es un reto ser madre, mujer y periodista al mismo tiempo en una sociedad tan desafiante?
Definitivamente es un reto, estudiar y ejercer el periodismo es un desafío en general, porque es una de las pocas carreras que permite explorar diversos aspectos y temas de nuestra sociedad, con información objetiva y precisa, respaldada por la libre expresión. Desde el primer año de estudios, realicé prácticas preprofesionales por mi cuenta en medios como Radio Nevada, Canal 8 (ahora ATV), y luego en diario Correo. Esto fortaleció mis aspiraciones en dicha carrera tan apasionante, me reconforta ver cómo a través del trabajo puedes ayudar a la sociedad.
¿Por ser mujer, le han cerrado las puertas en el campo laboral o profesional?
No, incluso cuando estaba en quinto año de periodismo, ya estuve trabajando en el diario Correo. Incluso, postulé a una beca para trabajar en el área de comunicación, específicamente en prensa, y la gané en la Southern, sin embargo, me desanimó la idea de viajar, me sentía acobardada y con la sensación de no tener suficientes conocimientos para aprovechar esa oportunidad. A pesar de eso, no he sentido que se hayan cerrado las puertas, pero noté que hay mucho machismo. Cuando una mujer alcanza ciertos logros, siempre hay personas que formulan comentarios negativos, pero en mi caso, esas situaciones me dan más fuerza para seguir adelante.
¿Cuáles fueron las dificultades que enfrentó en sus inicios profesionales con la llegada de sus hijos?
Cuando trabajaba en SEDAPAR en prensa institucional, recuerdo que una vez escuché a mi jefe expresar que prefería tener personas solteras y no casadas, según él, las mujeres con matrimonio suelen pedir permisos a sus esposos para trabajar y eso obstaculizaba el desempeño. Al principio, pensé que esa era una opinión compartida por varias personas, pero al investigar más, me di cuenta de que era una opinión personal.
¿Cómo superó esas dificultades, mantener ese equilibrio entre su vida profesional y personal?
A pesar de los obstáculos, he contado con el apoyo fundamental de mi madre, figura clave en mi formación tanto personal como profesional. Su apoyo incondicional me permitió trabajar y estudiar, fue un pilar en la consecución de mis objetivos, en mi desarrollo como persona y madre.
¿Cree que la experiencia de ser madre enriqueció su perspectiva y enfoque en el periodismo y la comunicación?
Definitivamente, ser madre es un regalo invaluable, la maternidad es una etapa mágica en la vida de una mujer, donde se comprende realmente lo que es gestar a una persona durante nueve meses en el vientre. Durante este tiempo, se desarrolla una compenetración indescriptible entre madre e hijo, que va más allá del amor y el sacrificio constante. Nos convertimos en un faro de luz en la vida de nuestros hijos, guiándolos con sabiduría y brindándoles ternura. La maternidad es un viaje hermoso lleno de momentos dulces, desafíos, risas y lágrimas. Es un amor incondicional que trasciende cualquier barrera que pueda existir en el mundo.
Como decana nacional del Colegio de Periodistas del Perú, ¿considera que la maternidad influya en las oportunidades y desafíos de las mujeres periodistas en el país?
Hoy en día, estamos preparadas para esta etapa importante de nuestra vida maternal. Además, las normativas legales vigentes permiten el desarrollo pleno de esta etapa para las mujeres peruanas. Estamos respaldadas por la ley, lo que ya no supone un obstáculo para alcanzar nuestros objetivos laborales y personales. Sin embargo, es importante que en casa tu pareja sea realmente uno de los pilares fundamentales, la crianza de un hijo corresponde a ambos padres, lo que fortalece los valores en nuestros hijos. Para tomar la decisión de tener un hijo, debemos estar preparadas en todos los sentidos, especialmente emocionalmente, para brindarles ese amor puro que merecen.
¿Cuáles serían sus consejos para las mujeres periodistas que son madres y buscan destacarse en la profesión sin descuidar su rol como madre?
A todas las madres periodistas que tienen esa pasión por la verdad y un amor inquebrantable por sus familias, les diría que sean la inspiración de todos. El día de la madre honramos a aquellas mujeres valientes que están en búsqueda de la noticia, mientras cuidan de sus seres queridos. Es una dedicación sacrificada, pero con la recompensa de poder ayudar a la ciudadanía.