Luego de más de dos décadas, la venerada imagen del Señor de los Milagros volverá a recorrer las calles del Callao este domingo 26 de octubre, en una procesión histórica que ha despertado gran expectativa entre los fieles chalacos.
La última visita del Cristo de Pachacamilla a la provincia constitucional fue en octubre de 2003, por lo que el regreso del llamado “Cristo Moreno” marcará un acontecimiento espiritual y cultural de gran relevancia.
Recorrido y actividades
Según informó Omar Chávez Nanquén, gerente de Participación Vecinal de la Municipalidad Provincial del Callao, la imagen partirá a las 6:00 a. m. desde el Santuario de Las Nazarenas, en el Centro de Lima.
El recorrido incluirá las avenidas Tacna, Nicolás de Piérola, Óscar R. Benavides (ex Colonial), Tingo María, Mariano Cornejo, Universitaria, La Marina y Guardia Chalaca, hasta llegar a Sáenz Peña y República de Panamá, donde se celebrará una misa central en honor al Señor de los Milagros.
“Después de 22 años, la imagen regresa al Callao. Llegará cerca de las diez de la mañana a la intersección de La Marina con Insurgentes, donde será recibida por los fieles y la Hermandad del Señor de los Milagros”, precisó Chávez.
A las 2:00 p. m. se realizará una ceremonia eucarística, con la participación de las imágenes del Señor del Mar y la Virgen del Carmen, patronos del Callao.
Medidas de seguridad
El municipio chalaco anunció un amplio despliegue de seguridad para garantizar el orden durante la procesión.
Un total de 1 500 serenos de la mancomunidad del Callao, junto a efectivos de la Policía Nacional del Perú, custodiarán la ruta procesional. Además, 15 cámaras de videovigilancia seguirán en tiempo real el desplazamiento del anda morada.
“La seguridad está completamente garantizada. Todas las acciones se coordinan con las 20 comisarías de la provincia y agentes de apoyo particular”, aseguró el funcionario.
Fe y tradición
La procesión del Señor de los Milagros, considerada una de las manifestaciones religiosas más grandes del mundo, vuelve al primer puerto del país como símbolo de fe, unidad y esperanza para miles de devotos que aguardan su paso.