El presidente del Consejo de Ministros, Eduardo Arana, se retiró este mediodía del Congreso de la República tras sustentar la Política General de Gobierno y solicitar el voto de confianza para su gabinete. Sin embargo, lo expuesto no habría logrado convencer a la mayoría de bancadas parlamentarias, que expresaron fuertes críticas y dudas sobre la capacidad del Ejecutivo para afrontar la grave crisis de inseguridad, corrupción y parálisis económica que afecta al país.
Redacción y Fotografía : Luis Parker
Durante su intervención, Arana planteó propuestas en materia de seguridad ciudadana, combate al crimen organizado y fortalecimiento institucional. Incluso hizo referencia al eventual traslado de presos extranjeros peligrosos a cárceles como el CECOT en El Salvador, y reafirmó el compromiso del Gobierno con unas Elecciones Generales 2026 libres y transparentes. Sin embargo, su llamado a la unidad no logró calmar las aguas en el Pleno.
Bancadas marcan distancia y rechazan confianza
Desde diversas tiendas políticas, las reacciones fueron categóricas. La congresista Ariana Orué (Podemos Perú) anunció que no respaldará al gabinete, acusando al premier de vínculos cuestionables y señalando el incumplimiento de promesas para el Callao, como la construcción de un hospital y una comisaría en Ventanilla. “El país se está desangrando”, dijo.
El parlamentario Diego Bazán (Renovación Popular) recordó promesas incumplidas, como la construcción de cinco penales que nunca se concretaron. Su colega José Luna Gálvez afirmó: “No se hizo nada de lo prometido, ¿por qué deberíamos darle la confianza?”. Asimismo, José Cueto, Jorge Montoya y Elvis Vergara coincidieron en pedir mano dura contra la delincuencia y el retiro del Perú de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
El Pleno se reanuda a las 3:00 p.m.
Pese a los anuncios del premier, la percepción generalizada es que no habría los votos suficientes para ratificar a su gabinete. La sesión del Congreso fue suspendida temporalmente y se reanudará a las 3:00 de la tarde, cuando se debatirá si lo planteado por Arana es merecedor del voto de confianza.
El escenario político sigue siendo incierto. Si el Congreso rechaza la cuestión de confianza, el Ejecutivo se vería obligado a recomponer el Consejo de Ministros, sumando un nuevo episodio de inestabilidad política en el país.
Desde las afueras del hemiciclo, las calles se mantienen en relativa calma, mientras los peruanos siguen atentos a lo que podría significar un nuevo punto de quiebre en la relación entre los poderes del Estado.