El Gobierno ha declarado los días 23 y 24 de diciembre como no laborables para los trabajadores del sector público, manteniendo el pago íntegro de sus remuneraciones. Esta medida busca fomentar el descanso y el equilibrio entre la vida laboral y personal, permitiendo que miles de servidores públicos puedan disfrutar de más tiempo con sus familias, organizar viajes cortos, realizar actividades recreativas o simplemente relajarse antes de las celebraciones navideñas.
Además, esta disposición contribuye a dinamizar la economía local, ya que muchas personas aprovechan estos días para consumir en restaurantes, hoteles y comercios, generando movimiento en sectores clave como turismo y gastronomía. En un contexto donde el bienestar emocional y la calidad de vida son cada vez más valorados, estas jornadas libres representan un gesto importante hacia la salud mental y la cohesión social, reforzando el espíritu festivo y la tradición de compartir.